Tour por Eslovenia, Croacia, Chequia y Austria

Bled

Guarda en tus memorias de viaje tu escapada al espléndido lago glacial Bled, toda una gema por descubrir en Eslovenia. El paisaje es verdaderamente idílico y se encuentra muy cerca de otros atractivos increíbles, como la Garganta de Vintgar y el Valle Radovna. Las alternativas en el lago incluyen senderismo a sus alrededores, nadar, subir al trenecito que recorre sus orillas, alquilar un kayak, practicar paddle surf, tomar un bote y llegar remando hasta la isla situada al centro para subir los 99 escalones hasta la campana de la iglesia y pedir un deseo al hacerla repicar. Subir al acantilado de 130 metros para tener un panorama maravilloso y visitar el castillo, que data del año 1011. Para añadir una dosis de diversión y adrenalina, deslízate por la colina mediante un tobogán. Aunque el pueblo es muy pequeño, no dejes de visitarlo para probar la deliciosa cream cake, tomar café en una terraza y pasar un buen rato en el casino.

Bratislava

Cuando buscas un destino de buen ambiente nocturno y deliciosa cerveza, tal vez Bratislava no se te ocurra en primera instancia; sin embargo, es una de las mejores ciudades para pasarla bien. Además, situada entre lugares históricos y urbes imperiales, no es sorpresa que también cuente con su propio castillo, en la cima de una colina como bien nos dicta el imaginario colectivo. La capital eslovaca se asienta junto al río Danubio, del cual tendrás buen panorama desde lo alto de la torre. Te llamará mucho la atención su templo azul, oficialmente Iglesia Santa Isabel, además de la Puerta de San Miguel, resquicio de la antigua fortaleza. La Plaza Mayor, el Ayuntamiento y la ópera de Bratislava componen los monumentos tradicionales que no te debes perder.

Cesky Krumlov

La ciudad de Cesky Krumlov ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y es que su conocido castillo es conocido como “La Perla del Renacimiento”. Entre sus lugares estrellas destacan los Jardines de Palacio, el mirador del Castillo de Cesky Krumlov o el Museo Schiele. Las calles de esta hermosa ciudad inspiran un aire medieval sin igual, sus entramadas calles y los tejados rojos te trasladan a épocas pasadas. Como curiosidad destacar que Cesky Krumlov recibió en el año 2012 el premio Manzana de Oro, conocido como los Óscar del Turismo”.

Dubrovnik

Si estás considerando pasar tus próximas vacaciones en un lugar mágico, repleto de historia y en medio de una naturaleza exquisita, ¿qué te parece la antigua Ragusa, Croacia? Su colosal muralla del siglo X que conforma un recorrido de 1940 metros crea una estampa singular gracias a su gruesa torre cilíndrica que parece surgir directa del mar. La mejor imagen de ella la obtendrás desde el teleférico, desde el cual te deleitará la armonía de los armoniosos tejados rojizos a dos aguas. Su duro pasado de invasiones bizantinas, venecianas, húngaras y turcas la dota de gran carácter, si bien la mayoría de las casas son nuevas luego de las 2 mil bombas lanzadas en pleno conflicto con Serbia, apenas en 1991. Al recorrer Dubrovnik inicia por la medieval Puerta de Pile, un hermoso bastión semicircular, para llegar a una vía de piedra que te conducirá a los palacios barrocos de la que fuera la zona aristocrática hasta la entrada de Napoleón. Imperdibles, la iglesia de San Blas, el Palacio de los Rectores y la espectacular Catedral de Velika Gospa, además de la preciosa Fuente de Onofrio, del siglo XV.

Feldkirch

Los amantes del medioevo quedarán hechizados por el encanto de Feldkirch, una preciosa ciudad en el occidente de Austria que aún conserva su estilo medieval. Descubre paso a paso la exquisita arquitectura mezclada con hermosos paisajes montañosos y campestres. Haciendo un recorrido por el centro histórico de la ciudad descubrirás hermosos lugares como katzenturn que formaba parte de las murallas de la ciudad, Muheletor donde en la antigüedad se vendían cerdos y Marktgasse, una de las plazas en las más comerciales de más antiguas de la ciudad. En tu recorrido no dejes de visitar la Domkirche St Nikolaus que se caracteriza por su exquisito estilo gótico. Feldkirch también es una ciudad alegre y festiva; uno de los festivales que más presencia tienen es el Poolbar Festival en el que se realizan diversas actividades culturales entre música, poesía, moda, cine y arte. Feldkirch hará que tu viaje se convierta en uno inolvidable.

Innsbruck

Si aún no te decides por unas vacaciones en la montaña o en una moderna ciudad, la buena noticia es que ¡Innsbruck lo tiene todo! En el corazón del Tirol, este maravilloso destino se convertirá en uno de tus favoritos. Desde el centro histórico medieval de la capital de los Alpes puedes llegar en cuestión de minutos a 2000 metros de altura, mediante un viaje panorámico por teleférico. Así, después de haber paseado por sus monumentos antiguos mundialmente famosos como el Castillo Ambras, de estilo renacentista y construido en 1563, estarás ahora contemplando una incomparable vista montañosa y del río Inn desde el parque alpino Karwendel, una zona protegida de belleza impresionante. El senderismo de montaña es una de las actividades favoritas, pero si el deporte no es lo tuyo también existe una amplia cartera de festivales, como el de música antigua, que celebra a los compositores renacentistas y barrocos. En el Palacio Imperial se celebran conciertos para bailar vals, en tanto que la Marktplatz es sede del New Orleans Festival. El torreón Ottoburg, la Basílica Wilten y el mausoleo de Maximiliano I conforman algunos de sus sitios de interés histórico, contrastantes con el futurista trampolín de esquí y otros edificios vanguardistas.

Lago De Garda

Lindau

Liubliana

Liubliana es la capital y mayor ciudad de Eslovenia. Cuenta aproximadamente con 270.828 habitantes repartidos en una de 275 kilómetros2. Se encuentra situada a 298 metros sobre el nivel del mar, aunque el punto más alto de la ciudad, el llamado Janski Hrib, alcanza los 794 metros.

Maglaj

Maribor

Favorecida por la naturaleza, entre viñedos, verdes valles y la vigilancia de la montaña Pohorje y el murmullo del río Drava, esta localidad eslovena conjuga los elementos de una urbe moderna y de un poblado romántico. Pasear por el centro histórico te llevará por calles exclusivamente peatonales y casas con tejados triangulares rojos hasta sus principales puntos de interés, como su antigua Catedral, la bonita Iglesia Franciscana y, sobre todo, su Castillo (sí, en pleno centro) con el Museo Regional de Maribor en su interior. Piérdete entre las callejuelas, parques y plazas de la segunda ciudad más importante del país hasta llegar al singular Monumento Conmemorativo NOB y luego al Old Vine House, con nada menos que 4 siglos a cuestas, para degustar los exquisitos vinos de la región de la Baja Estiria.

Medjugorje

El recorrido por Medjugorje es un atractivo para cualquier viajero, especialmente el dedicado al turismo religioso. De entrada, resulta interesante que exista un destino de peregrinaje como éste en plena región musulmana. El poblado se encuentra entre viñedos y plantaciones de tabaco. El santuario se levantó honrando a la Virgen María tras aparecerse a seis jóvenes y darles un mensaje de paz, en la colina Crnica, en junio de 1981. Desde entonces, los testimonios hablan de más manifestaciones y nuevos mensajes sobre reconciliación y paz mundial, además de que se refieren a curaciones milagrosas. Se edificó una estatua a la así llamada "Reina de la Paz", ante la que los creyentes llegan después de ascender el cerro entre rezos y meditaciones. Al borde del camino se erige una gran cruz de madera en el lugar del tercer día de las apariciones. Bajorrelieves de bronce, representando los misterios gloriosos se colocaron a lo largo del sendero. Aparte de estos sitios, todo el pueblo cuenta con innumerables centros religiosos, como confesionarios y espacios de oración.

Mostar

En tu próxima salida con Kerala Viajes, dirígete a un destino bosnio para conocer hasta el último rincón de Europa. Con una belleza arquitectónica como su mejor carta de presentación que representa además el triunfo de la cultura sobre la guerra, Mostar es un lugar que bien vale la pena visitar. El precioso Stari Most (Puente Viejo) es el símbolo de la ciudad tanto por escenificar perfectamente la reconciliación en Bosnia y Herzegovina como por su historia desde el siglo XV, cuando se construyó en madera para los comerciantes de la época, siendo suplido por uno de piedra en 1566. En 1993 fue destruido por las fuerzas croatas, por lo que la UNESCO se encargó de su reconstrucción idéntica al diseño original, declarándolo Patrimonio de la Humanidad junto con el resto del casco histórico de Mostar. En el museo War Photo Exhibition y en las fachadas de muchos edificios y viviendas aún pueden verse las huellas de la guerra. El casco antiguo es una fusión de estilos por la presencia histórica de musulmanes, judíos, católicos y ortodoxosas. Testigo de ellos son las “casas turcas” del siglo XVII, la Mezquita Karadjoz-Bey de 1557, la Iglesia católica de San Pedro y San Pablo con su altísimo Campanario de la Paz, así como la Vieja Catedral Ortodoxa de 1873.

Múnich

Todos los amantes de la cerveza (como tú) encuentran en Múnich un paraíso terrenal, especialmente durante su célebre festival Oktoberfest, en definitiva el más importante del mundo en la materia. Y es que el vínculo de la ciudad con la cerveza tiene sus orígenes en la propia fundación de la ciudad, realizada por monjes benedictinos quienes, como ya sabemos, eran ávidos productores de la bebida porque la necesitaban para ayudarles en sus ayunos. La capital de Bavaria es un importante destino turístico gracias a su casco antiguo con bellas muestras renacentistas y barrocas, sede de convenciones, eje de la industria bancaria y financiera, con una exitosa industria editorial literaria, excelente centro mayorista de básicos y con una ágil industria de aparatos ópticos, productos aeroespaciales y alta tecnología. Más que nada, a Múnich se le conoce por su música, siendo un lugar donde la ópera ha florecido, con orquestas y una filarmónica extraordinaria, además de las compañías estatales de Ópera y de Teatro. Como también alberga excelentes museos, es seguro que aquí hallarás buenas excusas para dar rienda suelta a tu afición artística.

Opatija

La localidad pesquera de Opatija está en Croacia entre Venecia y el Zagreb. Acoge la pintoresca zona de Lungo Mare, residencia estival datada del siglo pasado repleta de casitas en la costa y donde el turista podrá disfrutar de la gastronomía de la zona basada en el mejor pescado de Opatija y de la dieta mediterránea. Entre los lugares de interés destacamos el monumento a la Madonna y la Iglesia de la Asunción.

Plitvice

Plitvice es un auténtico espectáculo natural en el corazón de Croacia, se trata de 16 lagos interconectados rodeados por un frondoso bosque verde y la Unesco los ha declarado Patrimonio de la Humanidad por su singular estética. Los lagos de Plitvice han sido el reclamo turístico más importante de la zona desde el s.XIX.

Praga

No solamente es capital de la República Checa, ese país siempre calificado como uno de los líderes en calidad de vida y con la menor tasa de desempleo en el mundo, sino un lugar imperdible en tu lista de viajes prioritarios. La Ciudad de las Cien Torres es todo un museo al aire libre, una de esas ciudades de cuento con todo y castillo. Fue precisamente alrededor de la fortaleza que se originó la ciudad hace 10 siglos, que llegó a convertirse en la residencia de los Reyes de Bohemia y eje económico de la zona. Hoy es un paraíso para los amantes de la arquitectura, conjuntando estilos romano, gótico, renacentista, barroco, clásico, art nouveau, cubismo o funcionalismo. Las opciones son infinitas, desde la Plaza de la Ciudad Vieja hasta el Muro de John Lennon, así que debes llevar una agenda súper ordenada si quieres ver lo mejor de Praga en un par de días. Totalmente imperdibles son el Templo de Tyn, el hermoso Reloj Astronómico, las vistas panorámicas de la colina Petrin y la histórica puerta Torre de la Pólvora, además de la Iglesia de San Nicolás y el ya citado Castillo de Praga, área que incluye la Basílica de San Jorge, el Palacio Real, el Callejón de Oro y la Catedral San Vito.

Salzburgo

Una de las ciudades con más encanto y suntuosidad de Austria es sin lugar a duda es Salzburgo. La ciudad es tan antigua como moderna, tiene hermosos paisajes debido a que se ubica cerca de los Alpes; por la belleza que ostenta fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Hay infinidad de sitios que deben ser descubiertos una vez que se arribe a Salzburgo, uno de ellos es la Fortaleza de Hohensalzburg, edificada en el siglo XI en cuyo interior destacan las decoraciones de estilo medieval, así como objetos pertenecientes a dicha época. Aunque la fortaleza es uno de los edificios más emblemáticos de Salzburgo, existen otros como la Catedral de Salzburgo y el Palacio de Hellbrunn que valen en demasía la pena ser admirados. La Catedral, es otro emblema de la nación se identifica por su cúpula de estilo italiano y su delicado estilo barroco, fue construida en el siglo XVII Mientras tanto, el Palacio de Hellbrunn es otra de las piezas arquitectónicas que maravillan a quien está frente al él, fue construido en el siglo XVII y fungió como la casa de verano del Príncipe Markus Sittikus. Salzburgo también es conocida por ser la ciudad que vio nacer a uno de los grandes compositores y pianistas del siglo XVIII, Wolfgang Amadeus Mozart, a quién se le rinde honor dentro de un museo construido en su casa natal y que fue inaugurado desde 1880. Salzburgo tiene elegancia, belleza y distinción que no puede dejarse pasar por alto.

Sarajevo

Sarajevo, la capital de Bosnia y Herzegovina renació de las cenizas después de resultar seriamente dañada en la Guerra de los Balcanes; poco a poco fue retomando su brillo hasta ser hoy uno de los destinos más visitado del país. Sarajevo es moderno y a la vez elegante con una carga histórica bastante importante, misma que se hace presente en algunas de sus más antiguas edificaciones que se localizan justo en su casco antiguo mejor conocido como Bašcaršija que fuera construido por el Imperio Otomano, donde se localiza la plaza Sebilj, lugar donde se encuentra una preciosa fuente que casi siempre se encuentra rodeada de aves. Otro de sus lugares imprescindibles es la Mezquita Gazi Husrev – Beg que destaca por sus estructuras otomanas que son el símbolo de Bosnia. No te vayas de Sarajevo sin haber presenciado sus hermosos atardeceres desde el bastión amarillo, mejor conocido como Zuta Tabija desde donde las vistas de la ciudad son incomparables. Tradición, historia y modernidad te esperan en esta hermosa ciudad bosnia, donde la multiculturalidad fue y sigue siendo parte de su esencia.

Split

Si eres fan de tierras balcánicas, seguramente has contemplado un viaje a Split, el centro neurálgico de Dalmacia que pese a estar separada de los Balcanes por montañas conservan el vínculo del mismo modo de vida. La industria naval y la viticultura hacen de Split un centro urbano de importancia, además de estar repleto de sitios de interés. Por ejemplo, el Templo de Júpiter y el Mausoleo de Diocleciano (luego convertido en la Catedral de San Diomo con un campanario gótico). Este pasado romano de la ciudad fundada en el siglo IV también queda manifiesto en el Palacio de Diocleciano, al que se accede a través de la Puerta Aurea. Los recorridos obligatorios se encuentran en la Plaza Veneciana, el Paseo Marítimo, los cuatro puertos deportivos, el Museo Arqueológico y el Etnográfico, entre otros más.

Vaduz

Vaduz es el Principado de Liechtenstein, el estado es pequeño pero lleno de magia, en cada rincón puedes encontrar cosas maravillosas que te dejarán con la boca abierta. Visita Vaduz, considerado uno de los estados más pequeños de Europa, y sorpréndete con su castillo construido en el siglo XIV que está situado en la cima de las cumbres alpinas desde donde domina la ciudad. La Iglesia de San Florín, es otro de los edificios que no puedes dejar de hacerle una visita, fue construida en 1868, su estilo neogótico deja maravillado a cualquiera. En invierno la ciudad se cubre de blanco, lo cual la hace ver hermosa, dando paso a diversas actividades invernales como el esquí; durante el verano se llevan a cabo exposiciones de arte, así como excursiones en las que puedes gozar de los hermosos paisajes de la región. Abre un espacio en tu agenda vacacional y agrega en tu lista a Vaduz, estamos seguros de que no te defraudará.

Venecia

La sola mención de Venecia trae a tu mente el romance y la quietud que sus góndolas prometen. Si vas por tu luna de miel, el Puente de los Suspiros debe estar en el itinerario. Venecia es una tierra soñada por las almas románticas que esperan cruzar sus canales en pleno atardecer, aunque una buena caminata te permitirá apreciar las fachadas del Barrio Castello, el Palacio Ca’d’Oro, la Iglesia de San Giovanni y la Casa de Carlo Goldoni. Un paseo en lancha por las islas cercanas te llevará a una fábrica de vidrio de Murano, visitarás iglesias bizantinas en Torcello y podrás comprar encaje de hilo en Burano, además de admirar las casas pintadas con vivos colores.

Verona

Pese al romance asociado a Venecia, es realmente Verona la ciudad de los enamorados ya que es el escenario donde transcurre la trágica historia de Romeo y Julieta. Hoy puedes conocer la ficticia casa de Julieta con su hermosa escultura y su balcón. La contraparte histórica a esta Verona literaria nos habla de su fundación en el siglo I a.C., siendo una importante urbe para los antiguos romanos, quienes construyeron aquí la Arena, un enorme anfiteatro donde ahora se presentan conciertos de ópera. La implicada historia de conquistas bárbara, austríaca, francesa e italiana conformó una interesante arquitectura de la que puedes ser testigo con un buen paseo por sus calles donde irás encontrando las distintas iglesias, puentes, monumentos, arcos romanos y tumbas monumentales.

Viena

Viena es un referente tanto cultural como artístico, colmada de importantes destinos turísticos entre museos, teatros, parques, jardines y, sobre todo, su impresionante legado arquitectónico imperial y su riquísima gastronomía; detalles que hacen de la capital de Austria un destino turístico por excelencia. Catalogada como la capital de la música europea cuenta con prestigiosos centros operísticos y es sede de importantes festivales de música a lo largo del año como el Festival de primavera y el OsterKlang, por mencionar algunos. Sus fastuosos monumentos dan fe de la grandeza arquitectónica, tanto histórica como actual; los palacios imperiales como el de Belvedere o el de Schoennbrunn y la Catedral de San Esteban contrastan con los magníficos edificios modernos como el Hass Haus o el museo Albertina, que, sin duda, son puntos que explorar por dentro y por fuera. En cuanto a su gastronomía destaca la repostería, con su famosa tarta Sacher, y el arte vinícola, no por nada Viena cuenta con viñedos de gran trascendencia. Visita y descubre Viena, una capital que te maravillará a cada paso.

Zagreb

Zagreb es la capital croata que se distingue por su legado histórico y arquitectónico, hacer una visita a este lugar no tiene desperdicio ya que conserva muy bien su esencia medieval, combinada con la modernidad. En la ciudad parecieran coexistir dos ciudades en una: la Ciudad Baja y la Ciudad Alta, ambas, unidas por un funicular azul que fuera construido en 1891. En la parte Baja o Donji Grad se localizan grandes edificaciones austrohúngaras entre las que se distingue el museo Hrvatslo Narodno Kazaliste y por supuesto sus calles peatonales como Gajeva y Bogovióeva ulica, en las que puedes encontrar deliciosos cafés. Gornji Grad, la Ciudad Alta, es la parte más antigua de la ciudad, en ella impera un ambiente festivo y cultural, está plagada de museos que no sólo contienen la historia de la región, sino también tienen diferentes temáticas: por ejemplo, el Museo de las Relaciones Rotas, que literalmente está formado por varias colecciones de objetos que donaron personas que sufrieron una ruptura amorosa. Y a la hora de comer date una vuelta por el mercado más famoso de la urbe el Mercado Dolac. Zagreb, es un destino ideal para todo aquel que desee explorar dos mundos y una sola cultura.

Zugspitze