La Unión Europea cuenta con una fascinante colección de lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, seleccionados por reflejar la increíble diversidad de la cultura europea, relatando valiosas historias y los muchos modos en que los pueblos y culturas del continente siguen conectados con el mundo.
Uno de los destinos seleccionados para pertenecer a la Ruta del Patrimonio Mundial impulsada por la UNESCO y National Geographic es Tarragona y su ensamble arqueológico de Terraco. Y es que se trata de una hermosísima ciudad portuaria bañada por el Mar Mediterráneo que vale mucho la pena conocer.
Si nunca la has visitado, éste es el momento de preparar una escapada a Tarragona, una joya catalana incluida en muchos circuitos de Kerala Viajes y descubrir sus fabulosos rincones. Aquí te damos nuestros 5 motivos para visitar Tarragona y caer ante sus encantos.
1. Admirar la Catedral de Tarragona
Visita una de las catedrales más antiguas de España y conoce todos los pormenores artísticos que resguarda. Su Museo Diocesano conserva una valiosa colección de arte religioso tarraconense desde la época medieval: retablos, esculturas, tapices, orfebrería y piezas de arqueología romana. Son nada menos que 11 mil obras, de las cuales se muestran 237 en las salas de exposición permanente.
La Catedral de Tarragona, consagrada en 1331, conserva partes de estilo románico aunque es principalmente gótica, particularmente en el hermoso portal de su fachada en la que destacada su magnífico rosetón de 11 metros de diámetro. Dedicada a la patrona de Tarragona, Santa Tecla, en septiembre de cada año repica sus enormes campanas para celebrar las fiestas en su honor.
El conjunto catedralicio se ubica en el lugar donde que encontraba un templo romano, después una mezquita del siglo X y finalmente una basílica cristiana. Actualmente es un Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural Nacional, lo cual se debe a su impresionante estructura y a sus tesoros.
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2. Explorar la Tarraco romana
Lo más impresionante que verás en un viaje cultural a Tarragona es el conjunto arquitectónico que hace de ésta la más romana de las ciudades catalanas. La zona del casco histórico conocida como Tarraco Romana, llena de restos arqueológicos, en su momento fue una de las principales ciudades del imperio.
Dedícale tiempo a recorrer sus principales puntos de interés: la Torre del Pretorio, del año 73, que comunicaba con el Foro Provincial; los restos de la muralla que cruzan la ciudad y las sepulturas colocadas en plena calle, así como la Puerta de Pallol y la Plaza del Foro; también, la muy bien conservada Necrópolis Paleocristiana ubicada fuera del casco urbano, sin olvidarnos de los imponentes acueductos en las cercanías.
Si dispones de poco tiempo, por lo menos recorre los túneles subterráneos debajo del Circo Romano. Y, sobre todo, impresiónate con el soberbio Anfiteatro de Tarraco.
El Museo de Historia administra diversos monumentos romanos cuyas ruinas son visitas imprescindibles en Tarragona. Este vistazo al pasado te llevará 19 siglos atrás mediante monumentos que enuncian la gran importancia que tuvo la que fuera capital de la provincia de Hispania Citerior.
3. Conocer la faceta medieval tarraconense
Además de la Catedral y su claustro, en el casco antiguo acotado por murallas romanas, encontrarás maravillosos vestigios de la Edad Media. Allí mismo, frente al templo catedralicio, está la Plaza de la Seu, uno de los lugares más bonitos del centro histórico de Tarragona con sus históricos edificios que incluyen el antiguo Palacio de la Cambrería.
Otra parada imperdible de Tarragona alusiva a esa época es la Torre de las Monjas, construida a finales del siglo XIV formando parte del tramo de muralla medieval, a la que en época de Carlos V se adosó un baluarte. Otros rincones medievales tarraconenses son la Judería, el antiguo Hospital de Santa Tecla y lo que queda en pie del Castillo del Rey, reconstruido como fortificación medieval sobre lo que fuera una gran construcción romana.
4. Disfrutar su ambiente mediterráneo
No olvides que Tarragona tiene también un coqueto toque costero que le aporta su posición privilegiada, limitando con el Mar Mediterráneo. Su clima templado junto con sus playas de fina arena la convierten en el destino idóneo para veranear.
Toma el paseo del Balcón del Mediterráneo, al final de la Rambla Nova (la animada avenida de tiendas y restaurantes). Este balcón te dará una espléndida panorámica del Mare Nostrum, el puerto de Tarragona, el Anfiteatro y la bonita playa urbana del Miracle, en donde cada julio se realiza el Concurso Internacional de Fuegos Artificiales.
La gastronomía es otro elemento que abona a este esplendor mediterráneo, aunque es realmente un reflejo de las culturas que han pasado por su territorio, creando una personalidad culinaria única. Y es que no sólo hubo romanos sino también fenicios, musulmanes y francos en la provincia entera. Incluso, el famoso Pescado Azul de Tarragona posee Denominación de Origen.
5. Tomar parte de sus festividades
Desde su alegre Carnaval, uno de los más participativos de Cataluña especialmente durante la Rúa de la Artesanía, el calendario de actividades festivas de la ciudad está repleta todo el año. Seguro que en cualquier fecha que elijas para tu viaje habrá algo interesante y divertido en que participar.
Entre su activo programa cultural encontramos un evento documento desde el siglo XVI, la Procesión del Santo Entierro, el Viernes Santo. Aquí, concretamente en el casco antiguo, el recogimiento de la Semana Santa se realiza de manera especial con el sonido de los Armats.
Otros eventos que te podrían interesar son:
- Tarraco Viva. Cada mayo y durante dos semanas, puedes presenciar este festival de proyección internacional: luchas de gladiadores en el Anfiteatro, historias bajo las bóvedas del Circo o un campamento militar romano en el Campo de Marte, frente a las Murallas.
- Ciutat de Castells. Las actividades de este Patrimonio de la Humanidad se llevan a cabo en junio. Se trata de los Castells, la formación de torres humanas, una tradición originaria de Tarragona.
- Amfiteatrvm. Vive una recreación histórica con estupendos efectos visuales sobre la arena del Anfiteatro, para las mejores veladas veraniegas familiares (en agosto).
- Fiestas de Santa Tecla. Del 15 al 24 de septiembre se realizan las fiestas en honor a la patrona local, declaradas de Interés Turístico nacional y efectuadas desde el siglo XIV.
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Con más de dos mil años de historia, la capital de la provincia homónima y de la comarca del Tarragonés, al norte de España, tiene muchas facetas que debes conocer, monumentos por admirar, espacios que narran detallados pasajes históricos.
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