Cuando vayas de visita a la capital riojana, descubrirás que tiene un encanto muy particular y un montón de sitios de interés para explorar. Histórico cruce de vías desde la Edad Media, se dio a conocer gracias al Camino de Santiago, aunque hoy en día dista mucho de la errónea concepción de ser sólo un «lugar de paso».
En lo que no se equivoca su fama es en lo concerniente a sus buenos vinos y deliciosa comida, siendo una Capital Gastronómica desde 2012, así que comerás y beberás estupendamente, es un hecho. Pero en esta ocasión no hablaremos de su cultura vinícola ni de los platos típicos riojanos, sino de todas esas cosasque constituyen las visitas turísticas imprescindibles en Logroño.
Una escapada ideal en La Rioja
De esta ciudad se sabe que tiene un buen nivel de vida, que es moderna y a la vez con un casco antiguo muy bien preservado y que es el epicentro ideal para ir de excursión por las regiones de La Rioja. Descubre qué puedes hacer en tu visita a Logroño siguiendo la lectura.
1) Admirar sus monumentos
Lo primero que debes contemplar en tu escapada a Logroño con Kerala Viajes es un recorrido por sus principales edificios. Todo el Casco Histórico es prácticamente peatonal por lo que es muy agradable para pasear y ahí es donde encontrarás la mayor parte de los sitios de interés.
El Espolón
El corazón de Logroño es El Espolón, su plaza más emblemática y también el centro físico actual, pues el paseo surgió de manera extramuros. Con el nombre de Paseo Príncipe de Vergara, es una de sus principales áreas verdes y aquí hallarás una escultura ecuestre del General Baldomero Espartero. Y en la Concha del Espolón se celebran conciertos y la ofrenda a la Virgen en las Fiestas de San Mateo.
Concatedral de Santa María la Redonda
Entre los principales monumentos de Logroño destaca este templo del siglo XVI, un gran ejemplo del barroco riojano. De la representativa silueta de la Concatedral de Santa María la Redonda destacan sus dos torres (llamadas «Las Gemelas» pese a tener diferentes alturas) que adornan la Plaza del Mercado y sobresalen por encima de cualquier construcción en el casco antiguo. En su interior se conserva un cuadro atribuido a Miguel Ángel, «La Crucifixión».
Muralla del Revellín
En las cercanías de La Redonda te encontrarás con los restos de la antigua muralla defensiva de época medieval, otro de los lugares que ver en Logroño. Justo al lado se encuentra el Cubo del Revellín, que era un cubo artillero, y la Puerta del Revellín, la única entrada original que se conserva. En la actualidad, puedes conocer la historia de la ciudad a través de un audiovisual que se proyecta dentro del Cubo.
El Parlamento
No muy lejos del Revellín y ubicado en el otrora Convento de la Merced (después también fue fábrica de tabaco), la portada barroca del siglo XVII convierte al Parlamento de La Rioja en un detalle muy fotogénico de la localidad.
Monumento a la Valvanerada
Sobre la céntrica Calle Portales, delante de la antigua fábrica de tabaco (hoy sede de la Sala Amós Salvador de arte contemporáneo), verás una singular escultura que representa la marcha de 63 km de la ruta nocturna entre Logroño y el Monasterio de Valvanera. Se lleva a cabo en abril y cada año suma más adeptos.
Iglesia de Santiago el Real
Una parada obligada en Logroño es esta iglesia ligada al Camino de Santiago, que resguarda a la Cripta de los Condenados y a la Virgen de la Esperanza, la patrona de la ciudad.
Plaza de la Oca
No precisamente un edificio monumental, pero sí un punto muy atractivo. La Plaza de la Oca, llamada en realidad Plaza de Santiago y anexa a la iglesia que acabas de contemplar, es uno de los lugares de interés en Logroño más peculiares. En ella se representan, pintados en el piso a manera de tablero del Juego de la Oca, los pueblos de La Rioja por donde pasa el Camino de Santiago.
Teatro Bretón de los Herreros
Su importancia radica en su condición histórica: inaugurado en 1880, aquí se proyectó la primera cinta cinematográfica de la ciudad. A la fecha sigue siendo uno de los recintos más representativos en España y su fachada es digna de fotografiar.
Café Moderno
¿Un café es un sitio imperdible en Logroño?, te preguntarás. Pues sí, ya que si bien su nombre es Café Moderno, su origen se remonta a 1916, convirtiéndose ya en parte medular del ambiente de la ciudad. Por aquí han pasado innumerables artistas y el local cuenta incluso con su propio himno.
Puente de Piedra y Puente de Hierro
Si se trata de conocer los sitios simbólicos de Logroño, no debe faltar el flamante Puente de Piedra, que comunica y embellece a la ciudad desde 1884. Es tan representativo, que figura en el escudo de Logroño. Se trata de uno de los cuatro puentes de la capital riojana y el más bonito. También llamado Puente de San Juan de Ortega, por este punto entra la Ruta Jacobea del Camino de Santiago. En tanto, el Puente de Hierro (o Puente de Sagasta), inaugurado en 1882, es otra preciosa estructura que también atraviesa el río Ebro. Ambos te deparan una caminata muy atractiva.
Casa de las Ciencias
Del otro lado del Ebro, tras cruzar alguno de los puentes, se sitúa un edificio centenario muy llamativo que alberga a la Casa de las Ciencias, en donde hay buena oferta cultural y artística. En su Jardín de las Ciencias se llevan a cabo actividades de aprendizaje al aire libre.
2) Ir de tapas a la calle Laurel
Ya que conoces bien los rincones más icónicos de Logroño,es hora de tapear. A eso de las 7 de la noche el mejor plan se arma entre copas, pinchos y buen ambiente. No habrá mejor manera de cerrar con broche de oro el primer día de tu visita.
En todo el centro histórico abundan los bares, siendo la calle Laurel el eje de la vida social. Esta rúa es la zona por excelencia del tapeo en toda La Rioja y hasta en España completa. Conocida como «Ruta de los elefantes», la Calle Laurel es el principal reclamo turístico y sería un pecado pasarla por alto. Tanto, como dejar de probar los magníficos vinos de La Rioja.
Hay más de 60 lugares para el buen copeo y degustar la deliciosa gastronomía riojana. Crea tu propia ruta de pinchos en Logroño yendo de aquí para allá para llevarte el sabor riojano en el paladar y en los recuerdos por mucho tiempo.
3) Vivir un momento de relax en un spa
Después de una visita monumental tan interesante y una excelente noche de tapas, una sesión de spa viene como anillo al dedo. Recompensa a tus pies y a todo tu cuerpo tras las andanzas del día anterior con un tratamiento que te renovará totalmente.
Déjate consentir por la experiencia relajante antes de volver a la rutina diaria. Será un momento tan especial que te hará desear combinar todos tus viajes entre el ajetreo del turismo cultural y la paz de ese pequeño capricho reconfortante.
Lo mejor es que, al contratar tu escapada relax con Kerala Viajes, ya no tendrás que preocuparte por buscar alojamiento, pues ésta consiste en un 2 en 1: hotel con desayuno y entrada al spa. ¡No dejes pasar la oportunidad!
4) Visitar sus calados en Ruavieja
Antes de volver a casa, ocupa un tiempo de tu viaje a Logroño de 2 días para adentrarte en sus calados, es decir las bodegas que se encuentran en la calle Ruavieja, una de las arterias principales de la ciudad. Sí, dijimos que no nos enfocaríamos en las visitas enoturísticas en este artículo (te recomendamos leer nuestro blog sobre las fiestas riojanas del vino), pero es imposible obviar esta recomendación de visita obligatoria. El más conocido es el de San Gregorio, aunque hay otras opciones.
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Os habéis dejado el visitar la sede de los guarros mugremitas y echarles una meada en la puerta, aunque eso sí, hay que tener cuidado con los piojos y ratas que ahí anidan, además el mal olor.